DE LA SOCIEDAD DEL DESCARTE A LA PARTICIPACIÓN.

Durante 14 años hemos repetido la Semana Solidaria, pero cada año afrontamos diversas realidades, situaciones o problemas que afectan a personas o colectivos de personas en situación de exclusión. Y cada año vemos y profundizamos, con las aportaciones de todos, vías de posibles soluciones…

 

Este año afrontamos dos situaciones:

  1. La cultura del descarte que lleva consigo la sociedad capitalista, es decir, que esta sociedad está descartando a personas y colectivos que no interesan. Es decir el valor de la dignidad de cada persona queda desechado para muchas personas… Y se crean muros que dividen a las personas. Por cierto desde la caída del Muro de Berlín hace 28 años han aumentado de unos 15 que había a 70 que existen en estos momentos, según un estudio de la universidad de Quebec Canadá.

De ello nos habló Arcadi Oliveres, economista, expresidente de Justicia y Paz de Barcelona y premio “Constructores de Paz” de este año “por su incansable activismo y compromiso con la promoción de la paz, los derechos humanos, la justicia social y el desarme”. Habló de los que quedan fuera de la vida social, política y cultural, denunciando que es posible la inserción. Su discurso fue de denuncia y ampliamente aplaudida por el numero público.

 

  1. Contra el descarte, la participación. Dimos voz a proyectos e iniciativas que ponen los cimientos para construir relaciones basadas en la participación y la inclusión. Experiencias de acogida contra muros invisibles de marginación. Juan Linares, misionero salesiano 40 años en República Dominicana nos desgranó el proyecto de “Muchachos y muchachas con Don Bosco”, una red para el trabajo de los jóvenes en exclusión.

 

 

Ángela Sánchez de la Fundación Amaranta de Gijón fue más concreta al hablar contra la explotación de la mujer

 

El viernes, VICENTE ROMERO, escritor, periodista y corresponsal de TVE disertó sobre países en proceso de reconciliación. Reconciliación que debe basarse en el perdón y no en la injustica; comentando la dificultad porque los procesos de reconciliación están vinculados a intereses de unos pocos.

 

Todo ello ambientado con la exposición de Médicos del Mundo, el café solidario, la venta de Comercio Justo, el calendario… Y el público que abarrotó la sala los cuatros días.

Los medios de comunicación dieron cada día amplia información que hizo extensible la sensibilización.

Los organizadores de la Fundación JuanSoñador y de Adeco – Asturias nos mostramos felices de que haya gente con ganas de pensar y reflexionar sobre nuestra sociedad y sus situaciones conflictivas para conociendo afrontar las posibilidades y poder intervenir.

Debemos seguir soñando un mundo, una sociedad más justa y fraterna. La clave es contar con ciudadanos sensibles a estar realidades… Y que nuestros políticos sean transparentes, abiertos, que cuiden de los ciudadanos, siempre preguntándose por las nuevas posibilidades para todos.